La ocasión perfecta para visitar los Países Bajos, los vecinos del norte y, sin embargo, tan diferentes. De camino a Ámsterdam, pasará por el campo y los molinos de viento. Escuchará historias sobre las constantes luchas de los holandeses contra las inundaciones mortíferas de sus tierras bajas. Al llegar a la zona de Ámsterdam, se detendrá en una típica granja holandesa de queso y zuecos de madera llamada 'Rembrandthoeve' cerca del río Amstel. Continúe el recorrido en autobús y luego haga una parada para tomar fotografías en un típico molino de viento histórico.
Al entrar en la ciudad, verá el Banco Nacional de los Países Bajos, la famosa fábrica de cerveza Heineken y la Galería de Pintura, con los grandes maestros holandeses como Rembrandt y Van Gogh. Desde la iglesia de Saint-Nicolas, disfrute de un paseo de 20 minutos pasando por la estación central neogótica hasta llegar al palacio real en la plaza Dam. Aquí tendrá tiempo libre para disfrutar de un paseo en barco o un paseo por los llamados "coffee shops", el barrio rojo, etc.
Al salir de la ciudad, la ruta te llevará a través de las pintorescas casas flotantes y la réplica del barco de la Compañía de las Indias Orientales. Luego verás el Museo Judío y el monumento Memorial Judío, el famoso zoológico Artis y el impresionante Nemo, el Museo de la Ciencia diseñado por el mundialmente famoso arquitecto Renzo Piano.