No hay mejor manera que en bicicleta para descubrir la belleza y la riqueza de la Toscana, compartiendo la pasión por el ciclismo, el arte, la comida y el vino. Aquí se encuentran las áreas más hermosas y también las más adecuadas para un viaje en bicicleta. Desde el asiento de tu bicicleta, descubrirás cómo la vida de la Toscana avanza lentamente pero sin cesar, creando un equilibrio natural entre el arte, la cultura y la naturaleza.
Toscana es un paraíso para los ciclistas, quienes serán recibidos por suaves colinas adornadas con caminos de tierra sinuosos, caminos de curvas, viñedos y caminos rurales sombreados. Todos estos esplendores están enmarcados por un paisaje sorprendentemente variado donde podrás descubrir abadías, iglesias rurales y castillos. El paisaje se caracteriza por la profunda tierra roja, y se alterna entre campos de sol y viñedos, y está salpicado de antiguos castillos y aldeas medievales.
Muchas vistas panorámicas le permiten ver todo el camino hasta San Gimignano, con vistas a los bosques de hermosos robles italianos y corbezzoli. El recorrido se corona con una visita a la espléndida fortaleza medieval de Monteriggioni.